Ingredientes:

• 2 tazas de harina
• 250 gramos de nuez (Pekannuss)
• 225 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
• 90 gramos de azúcar glass o azúcar impalpable (Puderzucker)
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 1 pizca de sal

Decoración:

• ¾ de taza de azúcar glass
• 8 gramos de azúcar de vainilla (Vanillezucker)

Preparación:

Pon las nueces en la batidora y muelelas. Pueden quedar finas o con pedacitos más grandes. Depende de cómo quieras la galleta.

En un tazón pon la mantequilla y el azúcar y mezclarlo. Hasta que quede cremoso, como la consistencia de un betún.
Cierne la harina e incorporala a la mezcla de mantequilla, junto con la sal, la vainilla y la nuez.
En un punto donde la ya no pueda, debes amasarla a mano. Cuando esté todo integrado y la masa ya no se separe, haz una bola con la masa. Cubre la bola de masa con celofán de cocina (Frischhaltefolie) o en una bolsa de plástico y déjala en el refrigerador para que reposar toda la noche.

Al día siguiente cuando vayas a hacer las galletas, precalienta el horno a 170°.

Saca la masa del refrigerador y vuélvela a amasar, al principio se va a quebrar pero siguela juntando y amasando. Cuando se mantenga junta, puedes comenzar a formar bolitas de 2 a 3 centímetros. Y las colocas en la bandeja con papel encerado, dejando espacio entre ellas para que no se peguen.

Dependiendo del horno y del tamaño de las bolitas puede tomar de 7 a 12 minutos. Van a tomar un color dorado y ahí es cuando están listas.

Dejalas reposar 3, 4 minutos. En un plato hondo pon el resto de la azúcar glass y el azúcar de vainilla y mezcladas. Las galletas deben de estar calientes, lo suficiente para que el azúcar se adhiera, pero no para que te quemes. Revuelca cada galleta en el azúcar glass y déjalas en un plato plano para que terminen de enfriar.